¡Lucha contra la Caspa!

Como sabéis, en farmacia Santamaría hemos dedicado el mes de octubre al cabello así que hoy me toca hablaros de un asunto que a muchos y muchas nos trae por la calle de la amargura: la caspa.

¿Qué es la caspa?

La Pityriasis, conocida comunmente como caspa, es el nombre que se da al conjunto de escamillas blancuzcas que se forman en nuestro cuero cabelludo.

Podríamos decir que la caspa aparece por un exceso de renovación celular en forma de escamas o pequeñas costras. Como ocurre en cualquier parte de nuestro cuerpo, las células de la epidermis de nuestro cuero cabelludo son renovadas de forma continua y natural creando escamas. Lo que sucede es que, debido a múltiples factores que detallaremos a continuación, puede desencadenarse un episodio de recambio excesivo de células epidérmicas, que genera como resultado una producción anómala de costras y escamas.

¿Qué factores desencadenan la aparición de la caspa?

Como es lógico, los tipos de caspa existentes dependen de los factores que las originan. Entre ellos podríamos destacar:

• Aceleración excesiva de la renovación celular: el período de renovación celular que podría darse en condiciones normales, de 20 a 30 días, se reduce a más de la mitad, de 7 a 10 días, en muchas de las personas que tienen caspa.
• Proliferación de la flora microbiana: entre ellas del hongo Pityrosporum ovale o Malassezia furfur y el Pityrosporum orbiculare. Respecto al primero, se trata de un hongo que todos alojamos en nuestra piel de forma natural. Este hongo metaboliza la grasa humana produciendo una sustancia irritante que sería la causante del prurito, el enrojecimiento y la irritación.
• Exceso de grasa: también conocida como seborrea, está asociada al factor comentado anteriormente. Este exceso de grasa puede deberse a su vez a un desequilibrio hormonal como el que se da en la juventud, de los 20 a los 30 años, cuando la actividad de las glándulas sebáceas es mayor. Es por esto que la caspa apenas se da en la infancia y la vejez.
• Factores ambientales: como el cambio de estaciones. Está demostrado que durante inviernos fríos y secos existe una mayor aparición o empeoramiento de los casos de caspa.
• Otros factores: como genéticos, alergias, uso de productos para el cabello, como tintes, champús, lacas y fijadores, fuertes y alcalinos o el estrés, entre otros.

¿Qué tipos de caspa existen?

Existen varios tipos de caspa, según lo comentado anteriormente, aunque las más comunes son:

• La caspa seca o Pitytiriasis simple: nos sucede cuando encontramos escamas muy finas y secas, blancas o grisáceas, que se desprenden fácilmente y ocupan todo el cuero cabelludo posándose sobre nuestros hombros y espalda. Se trata de un tipo de caspa muy frecuente que puede mantenerse durante largos períodos de tiempo, rebrotar fácilmente o incluso evolucionar a caspa grasa.
• La caspa grasa o Pityriasis esteatoide: como su nombre indica está asociada a la secreción excesiva de grasa. A diferencia de la caspa seca, nuestro cabello toma un aspecto graso y sufrimos irritación, picores e inflamación del cuero cabelludo. Nuestras escamas son de mayor tamaño, amarillentas y quedan adheridas a nuestro cabello y cuero cabelludo. La caspa suele presentarse en áreas de mayor producción sebácea como la zona frontal de la cabeza e incluso puede llegar a extenderse a las orejas, las cejas, la nariz y el pecho. En casos graves puede llegar a desencadenarse alopecia.

¿Cómo puedo tratarla?

En el mercado existen múltiples tratamientos y champús adaptados a los tipos de caspa que presentemos:

• Para la caspa seca: te recomendaría un champú o tratamiento con sulfuro de selenio (probada eficacia queratolítica o exfoliante) y ácido salicídico (activo anti-fúngico) como el Champú Dercos Anticaspa Seca. Gracias a la triple acción de sus componentes: eliminará los micro-organismos de tu cuero cabelludo, exfoliará la caspa y regulará la descamación.
• Para la caspa grasa: os aconsejaría utilizar un champú con piritionato de zinc (inhibe la proliferación microbiana y ayuda a restablecer la renovación celular) como el champúAllopecium OTC Anticaspa especial para casos de seborrea y el champú Ducray Kelual DS Anticaspa muy bueno para la caspa grasa y los casos de inflamación e irritación. Te dejará una sensación de frescor y alivio en tu cuero cabelludo que te encantará.

Os he hablado de los champús pero recordad que también deberéis aplicar un tratamiento. Entre ellos encontramos uno de uso diario, como la loción Phyto Tratante Anticaspa, que calmará instantáneamente los picores y que podréis aplicar sobre cabello seco o húmedo y el tratamiento de choque de Rougj de gotas concentradas anticaspa con el que conseguiréis completar la lucha contra la caspa grasa.

Remedios naturales

Aunque existen tratamientos convencionales efectivos para la caspa, muchas personas prefieren alternativas naturales tanto para tratar como para prevenir esta condición del cuero cabelludo. Aquí se presentan algunos remedios naturales y consejos de prevención que pueden ser útiles:

• Aceite de Árbol de Té: Conocido por sus propiedades antifúngicas y antibacterianas, el aceite de árbol de té puede ser añadido a los champús o utilizado en dilución como tratamiento tópico para combatir la caspa.
• Vinagre de Sidra de Manzana: El vinagre ayuda a equilibrar el pH del cuero cabelludo y puede ser eficaz para reducir el crecimiento de hongos responsables de la caspa. Se puede aplicar diluido en agua como enjuague después del lavado.
• Aloe Vera: El gel de aloe vera tiene propiedades calmantes y puede aliviar la picazón del cuero cabelludo asociada con la caspa. Aplicar directamente sobre el cuero cabelludo antes de lavar el cabello.
• Bicarbonato de Sodio: Actúa como un exfoliante suave, ayudando a eliminar las células muertas de la piel y reduciendo la presencia de hongos. Se puede aplicar masajeando el cuero cabelludo mojado antes del lavado.

Consejos para prevenir la aparición de caspa

• Mantener una Buena Higiene del Cuero Cabelludo: Lavar el cabello regularmente con un champú adecuado para tu tipo de cabello y cuero cabelludo puede ayudar a prevenir la acumulación de células muertas y aceites, reduciendo el riesgo de caspa.
• Alimentación Saludable: Una dieta equilibrada rica en zinc, vitaminas B y ácidos grasos omega-3 puede fortalecer la salud del cuero cabelludo y prevenir la caspa.
• Evitar el Estrés: El estrés ha sido asociado con el empeoramiento de la caspa en algunas personas. Practicar técnicas de relajación y manejo del estrés puede tener un efecto positivo.
• Limitar el Uso de Productos de Estilizado: Algunos productos para el cabello pueden contribuir a la acumulación de residuos y agravar la caspa. Usar estos productos con moderación y asegurarse de lavar completamente el cabello después de su uso.

Por último, quería recomendaros que en caso de seborrea aguda, psoriasis, alopecia o de que la caspa persista, recurráis a vuestro dermatólogo para que pueda indicaros un tratamiento acorde a cada caso.

Espero haber sido de ayuda y, como siempre, ya sabéis ¡escribidnos si tenéis alguna duda!

Marga