-¿Sabe lo mejor de los corazones rotos?, preguntó la bibliotecaria.
-Negué.
-Que sólo pueden romperse de verdad una vez. Lo demás son rasguños…
Aunque sanar los corazones rotos a causa del mal de amores escapa de nuestras posibilidades, en Farmacia Santamaría nos hemos propuesto hacer todo lo que esté en nuestras manos para que ningún corazón deje de latir. Con esta idea, hemos incorporado un nuevo servicio en nuestra farmacia en Granada: un desfibrilador externo automatizado (DEA).
La parada cardiorespiratoria supone un gran problema de salud pública. De hecho, es una de las principales causas de muerte en el mundo. Al producirse, se detiene el latido cardíaco y la llegada de oxígeno al cerebro, por lo que la vida de la persona afectada depende de la rapidez con la que se intervenga. En estos casos, la reanimación cardiopulmonar (RCP) o la posibilidad de disponer de un desfibrilador cerca incrementan en tres de cada cuatro casos las probabilidades de sobrevivir, tal y como recuerdan en este artículo.
José Manuel Santamaría, fundador de nuestra botica, conoce de primera mano lo decisiva que puede ser la capacidad de respuesta en momentos así. Y es que una de las experiencias que lo sorprendió en su carrera como farmacéutico se produjo precisamente por este motivo, hace ya más de tres décadas. Aquel día, uno de los clientes pasó a comprar su medicación. En segundos, su rostro palideció y cayó al suelo, víctima de un infarto. Así comenzó una intensa carrera contrarreloj para salvarle la vida. En aquel entonces, no disponía de desfibrilador en el establecimiento. Pero gracias a sus conocimientos en primeros auxilios pudo mantenerlo con vida mientras llegaba la ambulancia. Al parecer, ya estaba infartado cuando entró en la farmacia, pero aquel hombre no supo reconocer en sus síntomas lo que le sucedía, según explicaron los sanitarios posteriormente.
Aquel episodio le impactó tanto que José Manuel no dudó de la idoneidad y ventajas de dotar la botica con un desfibrilador apenas le sugirieron la posibilidad de incorporarse a la red de espacios cardioseguros. En la actualidad -y desde hace ya más de un año- Farmacia Santamaría se encuentra entre los pocos establecimientos de Granada que disponen de este aparato para salvar vidas, pese a no estar entre los negocios obligados por ley a contar con uno.
En este caso, las carencias que sufre la ciudad en cuanto a zonas cardioprotegidas resultaron igualmente determinantes a la hora de dar un paso al frente. Y es que, aunque Granada se enfrenta a 200 muertes súbitas cada año, el 80% de los negocios incumple la normativa en materia de desfibriladores: o no tienen o lo tienen en malas condiciones o no saben usarlo, advierte el Diario Ideal.
Un modelo inteligente muy fiable
En Farmacia Santamaría disponemos un modelo automático inteligente de fácil uso y especialmente ideado para su empleo en espacios públicos. Puede aplicarse tanto en adultos como en niños.
El dispositivo emite señales visuales y auditivas claras que guían al socorrista a la hora de colocar los electrodos y aplicar la descarga, en caso necesario. El desfibrilador cuenta además con rigurosos mecanismos de control. De hecho, el choque eléctrico no se activa si la persona que ha perdido la consciencia ha sufrido un simple desmayo, en lugar de un infarto.
“Al colocarlo sobre la persona enferma, el propio dispositivo indica si es necesario activar la descarga para poner el corazón en ritmo y a funcionar nuevamente”, sostiene Javier Maestro, uno de los profesionales de Farmacia Santamaría.
El aparato se somete, por otra parte, a revisiones periódicas de mantenimiento para controlar su correcto funcionamiento, explica este farmacéutico adjunto.
Para mayor seguridad el equipo de la farmacia ha recibido además un curso específico sobre paradas cardíacas y el correcto uso del desfibrilador, formación a la que se añaden talleres anuales para reciclar los conocimientos, cuenta.
“Si se produce alguna emergencia en las inmediaciones que haga sospechar de una posible parada cardiorespiratoria, los afectados pueden acudir de inmediato a nuestra farmacia 24 horas en Granada para que los socorramos”, detalla Javier, quien recuerda la necesidad de “actuar con rapidez”, dado que los infartos representan la principal causa de muerte en nuestro país.
Las enfermedades cardiovasculares, primera causa de defunción en España Estas patologías son responsables de tres de cada diez muertes que se producen en el país, lo que sitúa su mortalidad por encima de enfermedades como el cáncer o las que afectan al sistema respiratorio, según los datos del Instituto Nacional de estadística (INE)
La prevención, vital para evitar muertes
Según la Fundación española del Corazón, “el 80% de las enfermedades del corazón y hasta el 90% de los infartos podrían prevenirse con un estilo de vida más saludable, realizando más ejercicio físico y vigilando nuestra dieta”.
De ahí la necesidad de poner el acento en las campañas de prevención que alerten contra los principales factores de riesgo cardiovascular, como puedan ser el tabaquismo, la diabetes, la hipertensión, el alto nivel de colesterol, el sedentarismo o la obesidad.
“Que casi uno de cada tres españoles siga muriendo por enfermedades cardiovasculares, hecho en gran medida evitable, es un indicador de que todavía nos queda mucho trabajo por hacer”, advierten los responsables de la Fundación.
Desde los distintos departamentos de Farmacia Santamaría, entre estos el de Dietética y Nutrición o el de Deporte, también llevamos a cabo esta necesaria labor de concienciación ciudadana encaminada a evitar las principales causas de estas patologías.
A esta importante labor de difusión sumamos nuestro compromiso como espacio cardioprotegido. Luchamos así para que los corazones rotos recuperen su latido.
Si sufres o presencias alguna emergencia en la ciudad, puedes consultar en este mapa los espacios cardioseguros con desfibrilador en Granada.
Si estás en las inmediaciones de nuestra farmacia, estaremos encantados de ayudarte a través de este servicio con el que nos proponemos seguir bombeando esperanza.
