Si has notado que en otoño se te cae más el pelo, con independencia de que seas hombre o mujer, que no cunda el pánico. Tiene una explicación: a nuestra cabeza le pasa algo parecido que a las hojas de los árboles y esta estación es más propicia para renovar la cabellera.
Este proceso forma parte del ciclo normal de nacimiento y muerte de los más de 100.000 cabellos que tenemos en nuestro cuero cabelludo y no es algo de lo que nos debamos preocupar.
La situación cambia cuando se empieza a notar que la caída del cabello es abundante. Cuando se pierden de media entre 50 y 100 cabellos diarios pasan a ser sustituidos por otros nuevos, pero si observamos que la pérdida es más abundante y la alopecia comienza a ser generalizada o por parches lo mejor es consultar con un dermatólogo.
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Los culpables de la caída del cabello
Lo cierto es que hay múltiples causas que favorecen la caída del pelo. Se trata de un problema que cada vez más afecta tanto a hombres como a mujeres. Aunque a ellos les suele influir en mayor medida a consecuencia de los cambios en la testosterona.
Sin embargo, no es esta hormona la única culpable de que lo sufran un 20% de varones de 20 años y un 30% de los de 30 (y así sucesivamente). Existen muchas más razones:
1) Genéticas. Los genes determinan que a ciertas edades haya áreas donde se empieza a notar la alopecia, como ocurre con las típicas ‘entradas’, conocidas en este caso como alopecia androgénica. Afecta más a hombres que a mujeres y por eso la mayoría de ellos mira con recelo el historial de su familia.
No obstante, según algunos estudios, la genética no lo es todo como demostró en 2013 una investigación del Hospital de la Universidad Case Medical Center de Cleveland (EEUU). Estudiando a 92 parejas de gemelos llegaron a la conclusión de que los hermanos que llevaban una vida sana (dieta, ejercicio…) tenían una calvicie mucho menos acentuada que los que no.
2) El estrés. Puede que el estrés diario que manejamos, ya sea físico o emocional, sea la raíz de la caída del pelo, pero no tanto por la ansiedad en sí misma como por las consecuencias que implica: si se duerme mal, se quita el apetito y los hábitos varían, lo que nos terminará afectando tarde o temprano.
3) Una mala alimentación. El cuidado de la dieta tiene efectos positivos sobre la salud en general. También para el cabello es fundamental. Así, para que reciba todos los nutrientes es necesario que tomemos alimentos que contengan proteínas, hierro, zinc, ácido fólico y vitaminas A y B.
4) Enfermedades como el hipotiroidismo o el hipertiroidismo (tiroides), el lupus, la sífilis o los desajustes hormonales pueden estar igualmente relacionados con la caída del cabello.
5) Efectos secundarios. La quimioterapia y algunos medicamentos causan también una repentina pérdida de pelo.
¿En qué momento la caída del pelo es motivo de preocupación?
Como se ha dicho con anterioridad, el hecho de que se nos caiga el pelo en otoño no significa que se tenga un problema. No conviene asustarse pero tampoco despreocuparse de la limpieza del cabello.
Hay un dato revelador que sirve de orientación para saber si la cosa es grave: un día normal perdemos en torno a 100 pelos, pero si el número se dispara a 250 cabellos conviene consultar con el dermatólogo.
¿Qué cuidados son imprescindibles para el cuidado del cabello?
Siempre es recomendable seguir una rutina diaria para el cuidado del pelo. Los consejos que destacamos a continuación ayudan a mantenerlo fuerte y sano:
- El cepillado del cabello a diario previene la caída, sin olvidar que para ello conviene utilizar un peine de púas no afiladas o cepillos que no resulten agresivos. En el caso de cabellos largos es bueno cepillar el pelo por la noche y antes del lavado porque exfolia el cuero cabelludo, estimula la circulación sanguínea y mejora el brillo.
- El lavado depende de las necesidades de cada persona pero siempre es conveniente utilizar productos apropiados. Dos veces por semana suele ser suficiente en la mayoría de los casos, pero es importante elegir correctamente el champú en función del tipo de cabello (normal, seco, graso o mixto). Se aconseja aclarar el pelo con agua fría y secarlo a temperatura moderada con una toalla o al aire, y si no queda más remedio, con un secador a ser posible profesional y a distancia.
- No se debe abusar de los tintes para el pelo pues, en ocasiones, deteriora el cabello.
- La alimentación sana es otro de los factores que frenan la caída del pelo. La dieta debe incluir fruta, verdura, cereales y pescado.
- También ayuda dejar el consumo de tabaco y huir de situaciones de estrés o ansiedad.
Tratamientos capilares
Los tratamientos capilares son en muchos casos eficaces para frenar la pérdida del cabello, una alternativa sobre la que se ha avanzado mucho en los últimos años logrando nutrir y reparar el pelo. A continuación ofrecemos tres fórmulas utilizadas y recomendadas para afrontar el problema de alopecia:
- Le kuth es un tratamiento enriquecido que oxigena y mejora toda la actividad vital del bulbo y del cuero cabelludo. Recomendable cuando la caída de cabello es muy acelerada.
- Las ampollas Quinafort para hombres se aplica 3 veces a la semana mediante un suave masaje sobre el cabello seco o húmedo para que actúe en las raíces. Otra de las marcas de ampollas anti-caída de pelo, con extractos vitamínicos, que destaca por su eficacia probada es Pilexil.
- Los complementos alimenticios también fortalecen el cabello. Éste es el caso de Phyto, un tratamiento de varios meses que debe iniciarse precisamente en otoño y finalizar en primavera. Combina vitaminas (B, C, E), ácidos grasos esenciales (aceite de borraja) y extractos de plantas.
¿Es necesario cortarse el pelo para evitar su caída?
¿Quién no ha escuchado alguna vez que cortarse el pelo con asiduidad ayuda a que te crezca con más fuerza? En realidad, el crecimiento del pelo tiene lugar debajo de la piel del cuero cabelludo, por lo que la frecuencia del corte no influye en su desarrollo. Tampoco por tenerlo largo afecta a la salud del cabello. Lo que sí influye es el cuidado y los factores que guardan relación con cambios fisiológicos o genéticos.
Por eso es conveniente acudir a profesionales, en este caso a un dermatólogo, si el problema persiste. En Farmacia Santamaría disponemos de un servicio gratuito de análisis capilar que te ayuda a buscar un tratamiento que se adapte a las características de tu cabello. Pásate por nuestras instalaciones, situadas en la calle Periodista José María Carulla Nº 8, y estaremos encantados en atenderte.
Caída estacional de pelo (otoño)
En estos días apreciamos como nuestro cabello cae más de lo que habitualmente lo hace. Esto suele alarmar a la mayoría de personas. Las consultas de los dermatólogos se llenan tanto de hombres como de mujeres preocupados por esta caída repentina. Encontramos cabellos en la almohada, por el suelo, en la ropa, más cantidad de lo normal en el cepillo y también cuando nos lavamos el pelo.
No debemos alarmarnos, este proceso es el que llamamos “caída estacional” es algo normal en esta época del año. Es una muda, una renovación cíclica que aunque resulta bastante aparatosa no debe asustarnos. El cabello se va renovando constantemente, perdemos unos 100 cabellos al día que son sustituidos por cabellos nuevos. Durante los meses de otoño esta caída se hará más evidente ya que en este tiempo serán más los cabellos que perderemos diariamente, debido a este proceso de renovación, y no de pérdida, que comentaba anteriormente, y que se prolongará durante tres meses, aproximadamente hasta finales de enero.
Consejos para la caída estacional
Y, ¿podemos hacer algo para ayudar a nuestro cabello en esta renovación? Claro que sí. Como siempre, una alimentación adecuada será fundamental también para tener un cabello sano y bonito. No podemos negar que con el ritmo de vida actual, trabajo, estrés, comidas fuera de casa, falta de descanso, nuestro cuerpo se resiente y todo esto se refleja en nuestra piel y en nuestro cabello. La mala alimentación influye también negativamente en la salud capilar.
Para mejorar esta situación, en lo que al cabello respecta, que es el tema que estamos tratando, podemos buscar apoyo en los productos de nutricosmética que tenemos a nuestra disposición para este fin concreto.
